Si vives en la costa o en una zona lluviosa, seguro sabes lo desagradable que es el exceso de humedad en el aire. No solo genera incomodidad, sino que también favorece la proliferación de microorganismos nocivos, provoca enfermedades y daños graves en el inmobiliario de los edificios.
¿Luchas con este problema y te gustaría encontrar una solución factible? Estás en el sitio correcto. En este artículo te explico cómo combatir la humedad y controlar sus niveles de manera efectiva. Además, podrás hacerlo con métodos al alcance de cualquiera y sin que tengas que gastarte un dineral.
También te he preparado un artículo para saber si necesitas comprar un deshumidificador para eliminar la humedad
¿Cuál es el nivel de humedad correcto en el hogar?
La humedad relativa es el porcentaje de vapor de agua presente en el aire en relación con la cantidad máxima que podría haber a la misma temperatura. Cuando alcanza el 100%, o el límite de la capacidad, llega al punto de rocío.
El nivel de humedad ideal en la atmósfera de un hogar debe estar entre el 40% y el 60%. Un valor por encima o debajo de ese rango es perjudicial para el bienestar. Por lo tanto, una proporción entre 70% y 80% es mucho si quieres disfrutar un ambiente saludable.
¿Cómo medir el porcentaje de humedad?
El instrumento adecuado para calcular la cantidad de vapor de agua en el ambiente es el higrómetro. Si no tienes uno, puedes consultar el porcentaje de humedad de la ciudad donde vives.
Experimento casero para medir la humedad
Para hacerlo, toma un cubo de metal con superficie brillante y llénalo de agua hasta 2/3 de su capacidad. Después, añade cubitos de hielo poco a poco y remuévelos para derretirlos. Haz esto hasta que se formen gotas en la superficie del cubo a causa de la condensación. Con ayuda de un termómetro comprueba la temperatura del agua al llegar a este punto, cuanto más alta sea mayor será la cantidad de vapor de agua en el ambiente.
¿Cómo puedo deshumidificar?
Si el porcentaje de humedad en tu hogar es superior al 60%, no te preocupes, es posible regularlo. La forma más fácil de hacerlo es con un deshumidificador, pues estos dispositivos están diseñados para absorber el agua del aire de forma efectiva.
Sin embargo, comprar y mantener uno o varios deshumidificadores es algo caro. Por eso, te ofrezco otros consejos para combatir este problema de manera sencilla y, en algunos casos, natural.
Identifica la causa de la humedad
El primer paso para mantener tu casa sin humedad es determinar el origen del problema. A veces las causas no son solo atmosféricas, sino averías en la infraestructura del edificio u otros motivos que se deben solucionar de raíz. Un ejemplo de esto son las fugas de fontanería, los desagües mal instalados y los goteos en los grifos.
Para detechar las zonas de más humedad, te recomiendo esta guía sobre dónde debes colocar un deshumidificador
Mejora la ventilación
La circulación de aire constante disminuye la humedad, lo cual ayuda a secar la condensación en las superficies, ventanas y suelos. Por lo tanto, puedes mejorar el ambiente de tu casa con solo instalar ventiladores y extractores en sitios estratégicos.
El baño es una de las habitaciones con más humedad, pues gran parte del agua que utilizamos dentro de él se evapora en el aire. Asimismo, la cocina y los sótanos suelen tener este mismo problema. Así que debes asegurarte de que dichos espacios se mantengan bien ventilados.
Otra alternativa es abrir dos ventanas situadas en puntos opuestos. Esto te permitirá crear una ventilación cruzada con un mayor flujo de viento fresco. Además, si el aire de afuera es más seco que el del interior de tu casa, solo el hecho de abrir las ventanas te ayudará.
Ten cuidado al usar calefacción
Muchos creen que un calefactor quita la humedad, pero no hay nada más alejado de la realidad. Por lo general, el aire caliente contiene más vapor de agua que el frío. Además, algunas estufas funcionan con gas butano, cuya combustión produce una alta cantidad de agua.
De igual forma, cuando encendemos la calefacción en invierno, creamos un contraste entre la temperatura interna y externa de nuestra casa. Esto provocará que algunas superficies ocasionen condensación al entrar en contacto con el aire caliente.
Con esto no estoy diciendo que tienes que dejar de usar calefacción, pero debes procurar mantener una temperatura adecuada y estar al tanto de cualquier cambio en el nivel de humedad en el ambiente.
Utiliza absorbentes y deshumidificadores caseros
Si te preguntas cómo quitar la humedad de una habitación cerrada, tienes que saber que hay absorbentes de humedad naturales, como el bicarbonato y la sal. Esta última tiene diferentes formas de uso.
Puedes hacer un deshumidificador sencillo con los siguientes ingredientes:
- 1 taza de sal.
- 1 taza de arroz.
- Un envase plástico con tapa.
Primero, haz agujeros pequeños en toda la superficie de la tapa del envase. Después, llena el contenedor con el arroz y la sal unidos de forma homogénea. Esta combinación es capaz de absorber la humedad de habitaciones y sitios pequeños como armarios, cajones y estantes. Basta con que cambies la mezcla cada vez que esté empapada.
Además, hay otra alternativa que requiere materiales distintos:
- Dos barreños de metal con una capacidad aproximada de 19 litros.
- Suficiente sal como para llenar uno de ellos.
Para empezar, debes agujerear uno de los barreños. A continuación metes el cubo agujereado dentro del otro asegurándote de que queda un espacio entre el fondo de ambos y lo llenas de sal. Y listo, tendrás un deshumidificador casero efectivo. El agua absorbida se irá al fondo del recipiente, por lo que te recomiendo vaciarlo cada semana.
Por otra parte, puedes darle un uso similar al bicarbonato y a otros polvos absorbentes profesionales. Solo tienes que ponerlos dentro de envases cubiertos con una tela delgada o de saquitos pequeños. Si los colocas en tu armario, te ayudarán a mantener tu ropa seca y sin olor a moho.
También puedes reutilizar el agua del deshumidificador para regar las plantas, o planchar la ropa
Evita generar más humedad
Los seres humanos somos grandes consumidores y, a la vez, generadores de agua. Lo hacemos de manera inevitable cuando cocinamos, nos duchamos, transpiramos y hablamos. Sin embargo, es posible disminuir nuestra producción de humedad con algunas precauciones simples.
Aunque las duchas prolongadas con agua tibia son relajantes, te recomiendo reducirlas un poco. Además, asegúrate de usar una campana extractora y tapar bien tus ollas al cocinar para que el vapor no se disperse en el aire.
Otra de las formas en las que generamos más agua de lo normal es cuando tendemos la ropa dentro de la casa. Te aconsejo hacerlo en alguna ventana o terraza, si el clima y el lugar donde vives lo permiten. Sin embargo, la mejor alternativa es usar una secadora.
Por último, evita tener demasiadas plantas en casa, pues algunas requieren mucho riego y crean un ambiente más húmedo. Así que puedes tenerlas afuera, dejar solo unas pocas como decoración o sustituirlas por otras que consuman menos agua.
Cierra la puerta de los cuartos húmedos
Una manera sencilla de evitar que el vapor de agua aumente y se disperse por el ambiente es mantener cerradas las habitaciones donde más se produce. Por eso, asegúrate de no tener las puertas abiertas cuando te estés duchando o cocinando.
Sustituye las superficies frías
Los marcos de metal en las puertas y ventanas son focos que atraen el frío hacia el interior de las casas. Esto se debe a que las superficies metálicas son excelentes conductores térmicos.
Por lo tanto, una forma efectiva de evitar la humedad por condensación es sustituir estos materiales por otros como la madera y el PVC. No obstante, también puedes usar aislantes térmicos y evitar el acceso del aire exterior.
Usa el aire acondicionado
El aire acondicionado no solo sirve para disminuir la temperatura ambiental, también tiene una función conocida como modo dry para absorber el vapor de agua. Con este modo, el dispositivo seguirá generando aire frío, pero con el ventilador a baja velocidad. Por lo tanto, es un método efectivo solo durante el verano.
Conclusión
Como ves, hay muchas maneras para deshumidificar tu casa sin tener que gastar una fortuna. Sin embargo, si tu problema con la humedad es grave, te aconsejo dejarlo en manos de un profesional y tomar las medidas necesarias para solucionarlo.